Fundación AMÁS y el Ayuntamiento de Fuenlabrada entrenan para la vida independiente a personas con discapacidad intelectual
Las personas con discapacidad intelectual o del desarrollo de la Fundación AMÁS en Fuenlabrada están de enhorabuena. La Fundación, en colaboración con el Ayuntamiento del municipio, ha puesto en marcha el primer piso de entrenamiento de esta localidad para promocionar la vida independiente de este colectivo.
La iniciativa permitirá que anualmente hasta 40 personas con discapacidad intelectual o del desarrollo puedan iniciarse en la vida independiente y superar, junto a sus familias, los miedos y las incertidumbres que esta conlleva. Lo harán en grupos de 4 a 5 personas, distribuidos en estancias entre semana o en fin de semana, en función de sus preferencias.
Este piso de entrenamiento que se une a los 3 con los que ya cuenta la Fundación AMÁS en Móstoles y a las 5 viviendas tuteladas y 2 supervisadas en Leganés. En ellos, el equipo de viviendas en comunidad de la Fundación trabaja para que las personas participen en sus vidas y en la comunidad desde un rol protagonista, independientemente de su autonomía, y buscando potenciar la calidad de vida de las personas y de sus familias a través de roles de ciudadanía plena y participación activa y significativa. Una iniciativa que contribuye, además, a promover la labor comunitaria y a prevenir el aislamiento y la soledad no deseada.
Vida en comunidad
“Buscamos que las personas con discapacidad intelectual que viven en Fuenlabrada tengan una primera experiencia fuera de casa, un primer contacto con la vida independiente” señala la directora de viviendas en comunidad de Fundación AMÁS, María Osorio, quien agradece al Ayuntamiento su colaboración para poner en marcha el proyecto.
Los pisos de entrenamiento como el que inaugura Fuenlabrada permiten a las personas descubrir alternativas diferentes a las que tradicionalmente se ofrecen a las personas con discapacidad intelectual que, en su mayoría, pasan del domicilio familiar a los servicios residenciales.
“Con estas experiencias les permitimos descubrir otras formas de vida en comunidad, alejadas de las instituciones como única opción de vivienda, pero con los apoyos necesarios para hacer posible una vida más normalizada, más inclusiva, siendo los protagonistas y en línea con la nueva estrategia estatal de desinstitucionalización”